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Cobos sueltos

En la madrugada de hoy, el oficialismo sufrió un duro revés al que se lo veía venir y no pudo hacer nada para impedirlo. Ni las amenazas de sanciones y sobre todo de destituciones pudieron amedrantar el voto negativo del presidente del Senado, Vice de Cristina Fernández, Julio Cobos.
En lo que veo una clara y elogiable estrategia política, este mendocino, que nadie le daba dos pesos cuando salió electo Vice, y puede decirse que fue visto como una marioneta mas del gran sistema K.
Cobos fue tratado de traidor y expulsado del radicalismo, el partido que lo hizo gobernador de Mendoza entre 2003 y 2007. De allí en adelante lo vi solo, como ese inmigrante que llega para asentarse en un nuevo país, donde es extranjero en la nueva tierra y desterrado de la anterior. Así toda la corporación K dejó de lado a este atleta frustrado, mirándolo con desconfianza pero imagino que jamás pensaron que Cobos le iba a dar el golpe mortal a la tan cuestionada R125.
¿Podrán digerir este mal trago Nestor, Moreno, el clan Fernández & Cía.?
Desde mi modesto punto de vista, solo puedo creer que estarán maquinando un contragolpe para dar castigo a todos aquellos desertores K que no se dejaron intimidar por las ocultas amenazas de Néstor Kirchner y los mercenarios corporativos.
Por otro lado, es de reinvindicar y elogiar la actitud de Cobos, el país se encontraba en llamas, y aunque ahora queda el desastre de lo que fue el gran incendio de mas de 120 días, el mendocino con una actitud salida no se de que parte de su imagen, se enfrento y dobló al poder K.
Anoche cuando volvía a casa, miré al cielo y vi que parecía una noche de primavera, toda calma y silenciosa. Sabía que a miles de kilómetros se definía una situación que me tuvo mal todo este tiempo, no por ser amigo del campo ni mucho menos del gobierno, sino porque pensé en todas las injusticias que se viven día a día, en la calle, en los barrios, dentro de muchos hogares que no tienen que comer, la droga de los que menos tienen, los jubilados olvidados, la odisea de hacerse atender en un hospital público, la lista podría hacerse demasiado extensa, pero nunca escuché sonar una cacerola, o una bocina por un chico que duerme en la intemperie o pide una moneda después de limpiar el parabrisas de lujosos vehículos.
Espero que todo esto que vivimos en estos días pasados, con debates en cafés, en mesas de familia, en escuelas, en universidades, y en cualquier lugar que hubo alguna reunión, siga extendiendose en todos los ámbitos en que se viven o se creen vivir injusticias. Siempre apelando a las instituciones, y en las próximas elecciones se ponga en el sobre la conciencia, para no volver a ver más en las más altas funciones democráticas esos que nos dejaron como estamos, ex presidentes ( que deberían ser presidiarios), ex gobernadores y legisladores que nada tienen que ver con la verdadera política y que no los nombro porque no quiero mufar este blog.
Las retenciones quedaran congeladas, según la Constitución, ese pequeño librito que Cristina y Néstor dejaron olvidado bajo la pata de alguna mesa para equilibrarla, dice que el Congreso no puede volver a tratar un tema durante el año corriente que fue rechazado por alguna de las Cámaras. Los impuestos, las retenciones y por sobre todo la tierra son necesidades sociales, que bien aprovechadas y de manera transparente podrían beneficiar a todos. No solo subvencionar a los que más tienen para dejar desamparados al todo el gran resto (con solo mirar como y con cuanto se vive en Capital Federal cualquiera que tenga dos dedos de frente se da cuenta), sino repartir como corresponde y de manera justa, sin demagogias y clientelismo. La tierra es de todos, el campo no. Los productores tienen entender que si bien trabajan el campo, lo que producen no es solo gracias a su labor, sino también a la cooperación de muchos otros sectores que se encuentran relegados por no estar normados por las leyes del voraz mercado cambiario.
Los granos, las carnes, los cereales, etc, tendrán un precio variable, pero cuanto cuesta el que sacrificio del médico que lucha por la vida de los demás, la enfermera que atiende las necesidades más urgentes, el maestro que forma a nuestros hijos, y la de todos aquellos que cumplen tareas nobilísimas, esas tareas que otros no tienen tiempo de dedicarse porque no son rentables. Estoy convencido de que es mejor ser pobre en un país rico que puede cubrir todas nuestras necesidades, que ser, como los menos en Argentina, ricos en un país muy pobre, donde se mira con indiferencia al prójimo y no se está dispuesto a ceder en absolutamente nada.
A este gobierno le queda tiempo todavía, se puede remendar los errores, con humildad y sacrificio, se puede ser mejor. Anoche el Vicepresidente lo demostró que se puede ser poderoso sin ser austero ni soberbio, a los K le queda aprender la lección para empezar mas que atar, a unirse a los Cobos sueltos.