De repente me doy cuenta de que mi vulnerabilidad es infinita,
que todo eso en lo que me sentia seguro, pleno, lleno, feliz,
por un manotazo, vaya a saber si divino o que,
queda en ruinas.
Asi como crecen los imperios, llegan a su apogeo, y luego se derrumban,
el curso de los acontecimientos de la vida de quien suscribe,
esta marioneta, sin velos, ni hilos al desnudo,
se viene en caida...
Siento los efectos de una creacion, nada puedo hacer,
me siento tan infinitamente pequeño,
tan humano.
Mis miserias se entremezclan con la impotencia,
con las preguntas,
el ¿por que?, el ¿para que?,
¿donde estoy?, ¿por que estoy?, ¿ para que estoy?
y la respuesta no se encuentra en ningun lado,
se escapa con las gotas que estremecen el asfalto,
que llegan de tan alto como aquellas ordenes misteriosas
que comandan el destino, mio y de los que amo.
Mi pecado lo conozco,
conozco todos y cada uno de ellos,
aunque algunos no los reconozca como tales...
"no quieres sacrificio, que yo lo daria;
no quieres holocausto.
Los sacrificios de Dios son el espiritu quebrantado;
al corazon contrito y humillado no despreciaras tú, oh Dios..."
reza el salmo 51 que grito en este momento,
justo cuando esa fe que esta enterrada extiende la mano desde la tumba,
sacrifico mi fe, mi vida, mi todo.
No vale mas que la que valdria una nueva,
pura, sin pecados.
No se rezar, me olvide de llegar a Dios,
y la unica manera que encuentro es esta,
mi camino, mi fuente, mi cable al cielo en este momento.
El corazon y la vida de este hombre estan sentenciados ya,
podria cambiar la condena,
pero a quien le importa ya...
Señor...
encontre una ranura en las paredes del eden y me fugue.
Quiza pueda volver a entrar,
pero estoy fuera,
lo que estan dentro no tienen porque sufrir.
No soy digno de juzgar a mis semejantes,
menos digno soy de juzgar al que da vuelta las paginas de mi libro
y planea en que momento dejar sentada mi felicidad,
me hago mas humano aun, casi abajo
rendido, fatigado, humillado...
ante tanta impotencia de saber que jamas podre entender
¿por que entender? para que entener?
no necesito respuestas, necesito que me escuches,
igualmente, sabes que diria,que callaria,
que lloraria, que sacrificaria.
No soy mas que un simple ser humano,
en estado de desperacion que intenta llegar a Dios.
El Hombre busca a un hijo perdido,
el hijo perdido no sabe donde está,
pero quiere y desea una sola cosa,
que por esta vez sepas que quiere encontrarte,
que quiere que lo cobijes y lo protejas,
y que nada malo pase ya.
Es mi egoismo de amar demasiado a las personas que siento
y temo que no esten donde tienen que estar...
ahi, en su plena felicidad...
aqui llorando rezo...
que mis plegarias lleguen al Hombre...
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