Existe un ojo con el que todo lo veo
todo aquello que se encuentra oculto
lo que nadie ve,
en las penumbras de la soledad
en la oscuridad del deseo
en las sombras de tu ausencia,
penetra la vista efímera del amor
y nota que nada ha quedado.
Es el vacío de una confesión
El ojo que todo lo ve
decide permanecer cerrado
no hay nada mas para conocer,
nada para amar
quizás observe mejor
tras el velo de su pupila
Visiones
Publicadas por César Zelar a la/s 7:08 p. m.
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