Y si de vez en cuando la derrota aparece por la retaguardia,
y su golpe parece ser letal,
dejandonos moribundos, insensatos, enojados,
la traición, la injusticia, la impotencia...
la respiración parece cesar, y todo se detiene.
La erupción de devolver la bofetada es inmensa...
casi insostenible...
y sin embargo ofrecemos (una vez más) la otra mejilla...
Hay pocas maneras de ganar fortaleza,
los golpes muchas veces entierran heridas que parecieran incurables...
pero solo existe un solo tipo de muerte,
y ni siquiera estamos seguros de si es buena o mala...
Después de recibir esa puñalada en la oscuridad,
en el lugar y en el momento que menos esperamos...
morimos...
pero resucitamos al tercer día...
con una sonrisa,
sabiendo de que en el mismo lugar,
en el mismo momento, en la misma circunstancia,
la vida no va a tener oportunidad...
la oportunidad de jugarnos una mala pasada...
Ya será tarde para ella...
habremos aprendido...
a ser un poquito (cada vez más) fuertes...
Resucitar
Publicadas por César Zelar a la/s 10:23 p. m.
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2 comentarios:
hola cesudo, todo en orden?
pase a ver tu blog, esta bueno, esas palabras salen de vos???
no conocia ese lado tuyo...
te dejo un abrazo y nos estamos viendo unos de estos dias, suertes cesudo.
enano
Oi, achei teu blog pelo google tá bem interessante gostei desse post. Quando der dá uma passada pelo meu blog, é sobre camisetas personalizadas, mostra passo a passo como criar uma camiseta personalizada bem maneira. Até mais.
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